Y
aquí estoy de nuevo escribiendo cartas que no enviaré a un remitente nunca
revelado porque qué sentido tiene calificar con nombre y apellidos si no me vas
a responder.
Ya
te escribí mucho antes incluso de que aparecieras junto a mí; mis palabras son
fiel testigo de aquello cuanto fui. Parodias del destino que te quita y te pone
como el antojo de un niño. Caos y descontrol es lo que provocas aquí, noches
sin dormir desarropada de un recuerdo que no ansía vivir dentro de mí.
Palabras
es lo único que nos ofrecimos y el deseo de sabernos prohibidos se borró con la
fuerza de un suspiro al despertar.
Y de
nuevo regresas a mí aunque tú ni siquiera lo hayas escogido. Filosofía barata
te di. Sonrisas y palabras tú a mí. ¿De qué sirvió?, dímelo, si ahora ni el
olvido compartimos. El olvido por desearnos, por hablarnos, por mirarnos.
Respóndeme
por qué regresas de nuevo, recuerdo, sobre algo que nunca fue; tu imagen en mi
retina, la tristeza en mis labios. Y no me comprendo. ¡Sal de aquí! Tu recuerdo
no puede vivir en mí porque tu presencia decidió huir.
Y tal vez tengas razón y
esta intensidad no sea más que el resultado de que no seas alcanzado, por eso
pídele a tu recuerdo que se lleve contigo esa sonrisa seductora, única de los
que no se saben seductores, y tus siempre acertadas palabras, más meditadas y
maduras que las que yo escribí, guiadas por el impulso y la sinrazón de este
descontrol que se creó en mí.
Y el dolor no es más que
un sentimiento por nosotros escogido, con la idea de sabernos perdidos en la
senda de este olvido. El olvido de no habernos elegido amándonos desesperados,
de no habernos deseado en el resplandor de la luna, de no habernos conocido más
allá de estos escritos. Ésta es mi sinrazón y, de nuevo, la incomprensión que
habita en mí al saberte que eres sólo tú a tiempo parcial con otra. Y yo
incapaz de despojarme de ti.
Y de nuevo mi caos regresa
aquí, sin tus palabras, sin ti.
Lo de hablar y escribir palabras bonitas está sobrevalorado, es triste pero siempre se necesita algo más.
ResponderEliminarTal vez demostrar algo que cuesta escribir.
(Que sepas que yo también me encuentro entre tus cuatro letras)
Eso es lo que debería ser la vida, más y más.
EliminarY los sentimientos más profundos son los que más cuesta expresar.
Yo echo de menos perderme entre las tuyas. ;)
Estremecedor..
ResponderEliminarGracias, creo.
EliminarHola preciosa entrada tienes toda la razon nohay nada mejor en esta vida que demostrar los sentimientos,se viviria muchisimo mejor..... besitos....
ResponderEliminarPues sí pero sería demasiado perfecto y nosotros hemos nacido para complicarlo "un poquitín". Gracias por pasarte. Besos.
EliminarMe senti bastante identificada en algunas partes !
ResponderEliminarAl escribir se busca que el lector se sumerja en las palabras y ser capaz de conseguirlo es positivo, creo yo; sin embargo, que nos sintamos identificados con sentimientos desgarradores del corazón es el resultado de la tristeza que nos invade. Deseo que te abandone pronto y sólo estés tú. Besos.
EliminarSiempre he pensado que la literatura es arte porque, ademas de ser bella, es la expresion misma del ser, la exposicion perpetua del alma. Escribes con el alma y eso te vuelve un artista.
ResponderEliminarUn abrazo.
Alexander, sabes como quedar sin palabras. Lo único que puedo decir es gracias porque sé que tus palabras salen de dentro. Beijinhos. ;)
EliminarMagnífica carta con algunos reproches inevitables que nacen del dolor de una ruptura no deseada.
ResponderEliminarMe pareció muy bueno lo que has escrito,Ardid.
Un abrazo.
Muchas gracias, ohma. Quería reflejar ese dolor de querer y no poder tener; si he conseguido transmitirlo es todo un logro. Besos
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