Ir al contenido principal

Quiero ser mujer

Comenzaba a estar cansada. Tras dos tardes de interminables caminatas, de entrar y salir de cada tienda olvidada, llegó a casa con el espíritu fracturado y la autoestima convertida en cenizas. Había que estar preparada: el maquillaje natural resultado de tres horas y dos kilos de potingues sobre su rostro. Todo por parecer natural. No podía olvidar el peinado; debía permacer inalterable cada vez que quitaba y ponía una prenda. Y, lo más importante, el ánimo y las ganas debían estar en su punto más álgido. Todo era necesario para encontrar el vestido ideal; ése que te trasmite seguridad, que te da porte, que te hace sentir una mujer. Porque, reconozcámoslo, cada vez que nos subimos a unos tacones, nos sentimos más mujer, la seguridad se apodera de nosotras y, con suerte, nos sentimos sexy. Es díficil de entender cuan gran valor puede tener una simple prenda, ya sea de mercadillo o de Dolce Gabanna, que nos convierte en aquella que siempre queremos ser.

Comentarios

  1. Parece una tontería,pero esa prenda tiene muchísimo valor,crees que te puedes comer el mundo si la llevas puesta.Hay que ver lo importante que es la imagen para la autoestima,¿eh?

    ResponderEliminar
  2. La verdad es que sí. Va inherente a nosotras. Pero lo mal que sienta salir a comprar una pieza en concreto y no traerte nada para casa. ¡Echo de menos las grandes ciudades! ¡Mis cazuelas por unos tacones!

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Confesó

Entradas populares de este blog

Sin definir

Me hubiera gustado dejar algún texto, pero el día no ha sido muy bueno. La verdad es que hay días que sería mejor no levantarse. Os dejo por unos días. Voy a perderme entre playas y bosques, ruinas de otros tiempos, pasadizos a otros mundos, atardeceres con ojos a medio abrir y, tal vez, locuras de corazón. Espero volver con aires renovados, inspiración a borbotones y medias sonrisas sin descubrir. Besos a tod@s. Entrad en septiembre con recuerdos veraniegos y esperanza de próximas escapadas.

Se acordaron de mí

Debería haberlo hecho la semana pasada, pero no he tenido demasiado tiempo libre. Por ello, os pido perdón. Primero, quiero agradecer  a Nelly de "Los Silencios de Nelly" por concederme el Premio "Flor Naranja". Para mí ha sido una grata sorpresa, no esperaba haberme hecho un huequecito tan pronto en este mundo. También, quiero aprovechar para agradecer a María de "Árbol de Luz" por concederme un dulce premio (mmm, ¡qué rico!). Muchísimas gracias por acordarte de mí.  Sólo espero que sigáis disfrutando de mis entradas y que a través de ellas, os provoque alguna sensación. En mi siguiente post, indicaré mis seleccionados para que disfruten de estos premios como estoy haciendo yo. PD: Si me he olvidado de algún premio (tenga esa sensación), por favor, decirlo y lo posteo. Gracias. Beijinhos.

Querido diario

Querido diario, Hoy venía desarreglado, como si no hubiera tenido tiempo a arreglarse. Tal vez, se haya desnudado para otra. Aunque eso ya no me importa. Hace tiempo que sus aventuras dejaron de importarme, y sin embargo, no consigo escapar de aquí. Parece que este maldito anillo bloquea mis fuerzas, mi voluntad. Hace tiempo que dejé de existir. Ya no existe la Aurora de antes o, por lo menos, hace tiempo que dejé de reconocerme frente al espejo. También dejé de buscar mi reflejo porque odiaba lo que en él veía.  Al principio, te culpabilizas por la situación. Te convences a ti misma que aquello es pasajero, que ha sido un hecho aislado, producto del stress, de la tensión o de cualquier otra cosa nimia que en aquel momento te parece lo más grande del mundo. Pero se repite una y otra vez. En cualquier momento. En cualquier situación. Cualquier día. Intentas prepararte, como si fuera necesario un ejercicio de meditación para calmar su ira, aunque el ejercicio lo hacía yo. Mi i...