Estoy completamente "caos". Esto de estar catorce horas de boda es agotador. Mis pies dan fe de ello, los pobres han dejado de existir para ser dos ladrillos agrietados. Lo malo es que en unas horas tendré que ponerme a hacer la maleta para mañana poner rumbo a los Países Bajos. ¡Pasad buena semana! ¡Nos vemos a la vuelta!
Nos escondimos en aquel viejo cuarto, tras las escaleras de la segunda planta, después de la sala de ordenadores de los de segundo de carrera, ¿te acuerdas? Dos pares de vaqueros tirados sobre el suelo. Mi camiseta sobre el pomo de la puerta. La tuya, sobre la pila de viejas CPU, de una generación ya olvidada. El aire la ondeaba como la bandera de un barco pirata reclamando su territorio. Golpeaste mi espalda contra la puerta, sujetando con firmeza mis brazos por las muñecas, quedando a tu merced. Me clavaste tu mirada con tal intensidad, que aún hoy sólo necesito cerrar los ojos para sentirla sola para mí. Me susurraste al oído derecho que cerrara los ojos y cuando mis párpados se bajaron sentí tus labios recorrer lentamente mi cuello hasta la clavícula, haciendo estremecer todo mi cuerpo. Tu lengua saboreó mis pezones haciéndolos endurecer. Ibas bajando hacia mi ombligo; tus manos acariciaban las curvas de mi cuerpo. Sutilmente retiraste la última pieza que cubría mi cuerpo, quedan
wuhh Países bajos qué suerte !!
ResponderEliminarpásalo bien !
Muchas gracias. ;) Espero venir con ideas renovadas y mucho que contar. Besos.
ResponderEliminarPero con los cambios de idioma es normal dudar y yo también dudo a veces (aunque no por eso,así que es peor). Lo malo es no saber y no querer aprender...
ResponderEliminarCuando yo estaba en el instituto no te suspendían por eso,pero sí te bajaban bastante la nota y al final había alguno que acababa con nota negativa,jeje